| La mayoría de las veces la solución es sencilla. |
| ¡Ya no sé qué hacer con mi cara! Hace unos meses vino Carmen con una consulta. Te cuento. Carmen lleva tomando anticonceptivos desde hace alrededor de un año. Y desde entonces ha notado cómo le han aparecido manchas en la cara. Muchas. Personalmente, siempre que dispenso un anticonceptivo soy muy pesada. Recalco una y otra vez el tema de las manchas. Insisto en la importancia de la protección solar cada vez que vienes a la farmacia porqué es mi deber y porqué no quiero que te quede la piel como si fueras un leopardo. Bien. A Carmen siempre le he dado el mismo consejo. Protégete del sol. Cada vez que sales de casa te pones el protector. Cada 2 horas lo reaplicas. Da igual si es verano o invierno. Protégete bien del sol. (Seguro que si te he dado alguna vez tu anticonceptivo te he pegado esta chapa). Seguimos. Carmen vino a mitades de mayo quejándose de las manchas que le habían aparecido en la cara. Estaba muy preocupada. Se sentía realmente mal.“Justo ahora que nos sacamos las mascarillas, mira qué cara se me ha quedado”. Le recordé la importancia del protector. Lo que cada mes le he recordado desde que inició el tratamiento y lo que seguro me has oído explicar alguna vez. Pues bien.Su respuesta. No me hace falta el protector. Me tomo las pastillas por la noche y así no me da el sol. A ver. A ver. A ver. Gran error. Qué mal que me explico. Fatal. Al darme cuenta de mi error corregí mi mensaje. Le expliqué que los anticonceptivos, sin importar la hora en que los tomes, circulan por nuestro cuerpo durante todo el día para llevar a cabo su cometido. Los anticonceptivos son hormonas sexuales que a la dosis estudiada evitan el embarazo, regulan el ciclo hormonal, mejoran el acné hormonal… Por contra, los anticonceptivos son medicamentos fotosensibilizantes. Quiero decir, hacen que nuestra piel sea más sensible a la radiación solar y por lo tanto la probabilidad de quemaduras y manchas es mayor. ¿Y qué puedo hacer ahora, Gemma? Me preguntó Carmen. Estábamos entrando al verano. Le propuse aplicarse el fotoprotector Be+ skinprotect super fluido durante todo el verano. Ya sabes. Cada vez que sales de casa. Reaplicando cada 2 horas. No importa si está nublado o hace sol. Quedamos que en septiembre nos volveríamos a ver para valorar un tratamiento despigmentante. Seguimos. Carmen vino a verme en septiembre. Feliz. Las vacaciones le sentaron genial. ¿Lo mejor? Sus manchas casi han desaparecido. ¿la clave? Su constancia aplicando mi consejo. Ahora su autoestima está bien. Se siente bien. Se ve bien. Y tiene ganas de seguir mejorando. Le recomendé empezar con una rutina despigmentante tras un análisis completo de su piel. Carmen volvió ayer, encantada con los resultados. Ahora quiere una rutina para devolver la luminosidad a su piel. Así que realicé un nuevo análisis de su piel y le recomendé una nueva rutina facial. ¿Los resultados? En breve. Escribo porque me gusta divulgar temas de salud. Seguro que tienes una amiga preocupada por sus manchas. O una amiga que toma anticonceptivos. Así que pégate el royo de buena amiga y compártele este post para que se pueda suscribir a la comunidad saludable de Farmacia Rubís para estar al día de todas las noticias, pensamientos y productos que os comparto a diario. Quiero formar parte de la comunidad healthy de Farmacia Rubís |
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