El secreto de una piel bonita es cuidarla, y el cuidado empieza con la protección solar (todos los días). El propósito del protector solar es prevenir el daño causado por la radiación solar, así que olvídate de las excusas y no pierdas más el tiempo, la protección solar es innegociable.
¿Quieres una piel bonita, luminosa y joven? Sigue leyendo…
1. ESCOGER MAL EL FILTRO SOLAR
Aun existen muchos falsos mitos alrededor de la protección solar, y uno de ellos es escoger un filtro que no nos protege suficiente. En términos de fotoprotección, existe el falso mito de creer que un SPF 30 protege el doble que un SPF15, y esto no funciona así. Cuando hablamos de filtros solares, SPF (Sun Protection Factor), hablamos del tiempo que ese producto nos protege frente a la radiación ultravioleta B (UVB).
En realidad un SPF15 no multiplica por 15 el tiempo que puedes exponerte al sol sin quemarte ya que los exámenes que se realizan en los laboratorios son en condiciones ideales que luego no suceden. Lo que quiero decir es que en el día a día existen roces, sudor, humedad… y todo eso hace desaparecer el protector solar. Por lo tanto, debes elegir un fotoprotector de amplio espectro (UVA, UVB, IR y visible) con un SPF alto y con la textura que mejor se adapte a tu piel y al uso que le vayas a dar.
2. NO USAR PROTECTOR PORQUÉ YA ERES MOREN@
La melanina es el pigmento que se encarga de protegerte de la radiación solar, y cuanto más morena es tu piel, mayor cantidad de melanina tiene; por lo tanto, más protección contra la radiación.
Sin embargo, la melanina no es un escudo infalibre y existen muchas complicaciones debidas a un exceso de sol.
En el caso de la radiación UVA, a corto plazo provoca una pigmentación inmediata (lo que llamamos estar moren@) que, en realidad es una consecuencia de que la piel ha detectado una agresión y se está defendiendo.
La radiación UVB es responsable de quemaduras solares e induce el enrojecimiento de la piel que luego pasará a la llamada pigmentación indirecta de la piel (bronceado más tardío y más duradero).
La mayor parte de la radiación que recibimos del sol es radiación infrarroja que pese a no ser muy nociva sí provoca calor y enrojecimiento de la piel y potencia los efectos nocivos del resto de radiaciones.
Por último, tenemos la radiación visible que es poco energética pero que se ha demostrado que provoca manchas en la piel.
En resumen, cada quemadura solar grave provoca daño celular en la piel (lo que conocemos como pelarte). Los rayos UVA, más penetrantes, alteran la estructura de la piel provocando menor elasticidad y mayor número de arrugas; además del daño en el ADN que aumenta el riesgo de cáncer de piel.
Así que, aunque tu piel sea morena por genética evita el daño solar con un protector específico para tu tipo de piel.
3. ESCOGER MAL LA TEXTURA DEL PROTECTOR SOLAR
En el mostrador de la farmacia aún me encuentro personas que no quieren usar protector solar porqué les molesta. Esto se debe a que no conocen el gran abanico de texturas que existen hoy en día para proteger nuestra piel de la radiación solar.
Tenemos múltiples texturas, desde las típicas cremas, emulsiones, lociones, aguas… La textura y la densidad del producto ya no puede ser una excusa para desproteger tu piel del sol.
Para personas con un piel seca tenemos las texturas en crema que son más densas
Crema: para pieles más secas porqué su textura es más enriquecida y densa.
Emulsion: para pieles mixtas que buscan una textura más ligera. (recuerda que tenemos emulsiones con color y efecto buena cara que son ideales para el día a día!)
Gel: los recomendamos para pieles grasas, desportistas, personas que sudan mucho… porqué es una textura ultraligera, sin grasa y que se absorben en segundos.
Loción: se trata de la textura ligera por excelencia que recomendamos para zonas extensas del cuerpo porqué son muy fáciles de aplicar.
Aguas, brumas, sprays: son las texturas más ligeras que podemos ofrecer para proteger la piel del cuerpo. Las recomendamos para personas que sudan mucho o que practican deporte, y a todas aquellas personas a las que les molesta sentir que se han puesto el protector solar.
Maquillaje compacto: se trata de maquillaje compacto de uso diario con SPF50, ideal para personas que se maquillan a diario, sobretodo porqué te permite reaplicar en cualquier situación en tu día a día.
Maquillaje cushion: es un revolucionario sistema ultraligero que recomiendo para llevar en el bolso y reaplicar el protector solar. Es una emulsión acuosa que se aplica con un cushion de maquillaje. Práctico, fácil y con un acabado espectacular para los más exigentes.
Éstas son las texturas más habituales, pero aún hay más, así que te invito a consultarme para descubrir cuáles se adaptan más a tu piel y a tu estilo de vida 😉
4. NO APLICAR SUFICIENTE CANTIDAD
Uno de los errores más frecuentes en fotoprotección es aplicar poca cantidad de producto.
La medida estándard necesaria es de 2mg/cm2. Ya sé que así dicho no es muy práctico, así que para hacerlo fácil, te cuento la regla de los 2 dedos.
Se trata de aplicar 2 dedos enteros de crema para cada zona de tu cuerpo.
5. FALTA DE CONSTANCIA
Aunque los filtros alarguen el tiempo que podemos estar bajo el sol sin que sea peligroso, no podemos confiar en que ese tiempo sea el ideal según el filtro escogido. La realidad es muy diferente a las condiciones en un laboratorio. Debes tener en cuenta el sudor, el roce, la humedad… y por eso, siempre te recomendaré que reapliques tu fotoprotector cada 2 horas. En resumen, lo ideal es aplicar protector solar unos 20 minutos antes de la exposicón solar y reaplicar cada dos horas.
6. LA CREMA DEL SOL SÓLO EN LA PLAYA
Este es el peor mito para tus manchas. Estamos muy concienciados de que a la playa se va con crema del sol, y en cambio no somos tan conscientes de la cantidad de radiación solar que recibimos a diario. En España, sobretodo, contamos con muchísimas horas de sol al año. Por eso, siempre insisto en la importancia de usar un filtro solar a diario.
Cuenta las horas que pasas al cabo del año en la playa y las horas en las que el sol te da por la calle en los 365 días. Abrumador, ¿verdad? pues las manchas de tu piel son consecuencia directa de salir de casa sin protección… de la misma manera que en invierno no sales sin tu abrigo, protege tu piel del sol todo el año y no sumes manchas a tu piel.
7. FILTROS SOLARES TÓXICOS
Últimamente existe una corriente anticosmética y anti filtros solares muy preocupante… y te voy a contar porqué.
Existen 3 tipos de filtros solars: químicos, físicos y biológicos.
Los filtros químicos absorben la radiación solar para que no penetre en la piel.
Los filtros físicos hacen que la radiación solar rebote como si fuera un espejo. Estos filtros quedan en la superficie de la piel, no se absorben. Son los filtros de elección para personas con la piel sensible o incluso con alteraciones como la dermatitis atópica.
Por último, los filtros biológicos son aquellos que estimulan la inmunidad de la piel y neutralizan los radicales libres provocados por el sol.
¿Qué te han parecido los 7 mitos sobre protección solar?
¿Cuántos de ellos seguías haciendo y vas a dejar de cometer ;)?
Mi intención es que tomes conciencia, el sol no es un juego porqué tu salud empieza en tu piel. Cuídate y disfruta del buen tiempo con seguridad.
Cualquier consulta o duda que tengas, intentaré ayudarte de la mejor forma posible, así que ya sabes dónde encontrarme.
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