Esta semana han saltado todas las alarmas porqué la FACUA advierte que en el prospecto de Dalsy no se hace alusión a los posibles efectos secundarios causados por el colorante amarillo anaranjado S o E-110.
No sé cuál es el objetivo de tal campaña, a mi modesto parecer debe tratarse de una campaña de marketing.
¿Marketing de guerrilla? sí, sí, una de esas campañas en que con un bajo coste y aprovechando la oportunidad de sorprender y asombrar a las personas una organización o empresa consigue una atención desbordante, publicidad gratuita y la oportunidad de ser viral.
Como farmacéutica puedo contaros que el uso de Dalsy lleva extendido desde hace más de 20 años. Concretamente, un medicamento que fue autorizado el 1 de octubre de 1997 y que se ha comercializado desde entonces sin interrupción alguna, pues merece algo de respeto. Creo en su seguridad y en su eficacia, y no sólo lo creo yo que soy una simple farmacéutica, sinó que también lo cree la AEMPS (Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios) que es el máximo organismo estatal responsable de garantizar a la sociedad, desde la perspectiva de servicio público, la calidad, seguridad, eficacia y correcta información de los medicamentos y productos sanitarios, desde su investigación hasta su utilización, en interés de la protección y promoción de la salud de las personas, de la sanidad animal y el medio ambiente.
Según la Facua, en las las indicaciones del ibuprofeno únicamente se hace referencia a que la inclusión del colorante “puede producir reacciones alérgicas”, y ello a su vez desembocar en “asma, especialmente en pacientes alérgicos al ácido acetil salicílico”.
MI OPINIÓN
El colorante E110 esun colorante alimentario sintético de color amarillo naranja que se emplea habitualmente en bebidas en polvo, batidos, zumos, jugos, galletas, flanes, gelatinas, snacks, conservas, mermeladas, pastelería, sopas instantáneas, salchicas y harinas, también como colorante en combinación con el colorante E102 para arroces y guisos.
Por supuesto, que los organismo encargados de la seguridad alimentaria y sanitaria se aseguran de que los aditivos tomados de manera ocasional y en las cantidades añadidas al producto Dalsy, y siempre que no se padezca alergia, no conllevan a ningún riesgo para la salud.
SENSACIONALISMO
Tengo la sensación de que cuando se trata de la industria farmacéutica, ciertos sectores de la sociedad ven a monstruos y conspiradores (no niego que pueda haberlos, pero no la mayoría) y no creo que haya más que en otros sectores, lo que no se puede hacer es crear alarma social de forma injustificada por una sustancia que se encuentra en un medicamento a dosis ínfimas y que, por suerte los niños no lo toman a diario y que, según el cálculo que he realizado para que pueda llegar a ser tóxico un niño debiera tomar más de 4 botes de Dalsy en un día .
¿Quién en su sano juicio le daría 4 botes de Dalsy a su hijo? De pasar, me inquietan más los efectos secundarios por intoxicación de Ibuprofeno en un menor que no el colorante maldito! Así que imagino que el padre o tutor que lo permitiera sería acusado de negligencia seguro!
POR UNA SOCIEDAD SANA Y EDUCADA
Por otro lado, me asusta más pensar en los hábitos alimentarios que hay en nuestra sociedad de hoy y que seguro muchos adultos y niños toman este u otro aditivo alimentario de forma continua a diario sin ser conscientes de ello ni de las consecuencias que puede llevarles, ¿qué hacemos con esto señores de la FACUA? ¿Prohibimos todos lo aditivos o educamos a la sociedad en una mejor alimentación y prevención de enfermedades?
Me entristece pensar que en muchos hogares se ingieren cantidades excesivas de aditivos, colorantes y grasas trans y que lo importante sea un aditivo que puede llegar a ser nocivo a dosis tóxicas.
Insto a los señores de la FACUA a realizar campañas de educación para una correcta alimentación y un estilo de vida saludable desde la responsabilidad y el conocimiento.