Hace unos días realicé una excursión con mi familia a un pueblecito de montaña, al llegar a la pequeña ermita en el bosque encontramos a unos “payeses” eco, muy simpáticos que tenían una paradita allí en medio del bosque. Nos pareció curioso y nos acercamos. Todo lo que producían era de agricultura ecológica (sin certificado, así que imagino que se referían a que ellos no usan productos químicos en sus cosechas…
Entre todos los productos de la huerta que tenían (pimientos rojos, acelgas, patatas…) hubo algunos que nos llamaron la atención y que por supuesto no pude dejar de llevarme a casa y provar:
- COLIFLOR MORADA: la chica me contó que es una variedad de coliflor antigua que no se suele cultivar porqué es poco productiva y que, por tanto, a los agricultores no les es rentable… Una lástima pensé yo… porqué es bonita de ver y al cocinarla quedó de un color añil preciosa y un sabor gustoso de verdad. Entre las propiedades nutricionales cabe destacar que a diferencia de su prima la coliflor blanca, ésta contiene carotenos que son grandes antioxidantes.
En resumen, una variedad diferente, única y muy saludable.
- KALE o BERZA DE TODA LA VIDA. Yo la había comido en cocidos y me gustaba pero nunca la había visto cruda, ya que no suele encontrares en las tiendas por Barcelona, así que ni siquiera tuvo que explicarme mucho porqué la quería provar a cocinar en casa sí o sí, pero lo que no sabía es que se podía hornear para hacer chips saludables de kale. Parece ser que en Estados Unidos está de moda por su bajo aporte calórico y su alto poder antioxidante, además de ser rico en calcio y fibra.
¿sabías que contiene más hierro que la carne de vacuno y más calcio que la leche de vaca?
Pues os comparto la receta por original y sabrosa, a ver si os animáis a prepararla:
1. Precalienta el horno a 175°C.
2. Limpia la kale con agua y seca muy bien (que no quede húmeda ni con nada de agua ya que esto evita que queden crujientes).
3. Separa la hoja del tallo y corta (puedes hacerlo con las manos) en pedazos del mismo tamaño.
4. Coloca en un bowl y agrega una cucharita de aceite. Mezcla muy bien con las manos para que el aceite cubra todas las hojas.
5. Coloca en una bandeja de hornear separadas para que no queden unas arribas de otras y hornea durante 8 minutos. Voltea la bandeja de lado y hornea 4 a 6 minutos más. Si están algo suaves deja 2 minutos más. Sazona con un poco de sal al gusto al final y deja reposar 3 minutos en la bandeja antes de comer.
Et voilà!!!
