Hoy empieza la campaña del Colegio de Farmacéuticos “Abans de deixar-t’hi la pell, consulta”, por eso voy a dedicar el post de esta semana a esta cruel enfermedad que cada año se lleva por delante a 600 personas.
Como muchas veces te he explicado, la piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo, y se encarga de funciones tan importantes como la regulación de la temperatura corporal y la defensa de nuestro cuerpo del sol y de las infecciones. Además, la piel recoge las sensaciones de temperatura, el tacto y el dolor.
¡Qué funciones tan importantes realiza y qué poquito caso solemos hacerle a nuestra piel!
Es común en la farmacia escuchar a nuestros pacientes decir que no se cuidan la piel porqué no les importa estar guapos… 🙁
Y yo no me canso de repetir y repetir que cuidar la piel no es cuestión de belleza, sino de salud! Claro, que una piel sana y bien cuidada es más bonita, no lo negaré; pero ese es el efecto secundario al cuidado adecuado, y no al revés.
La piel no es igual en todo el cuerpo, varía de grosor, color y textura según la zona. Está formada por 3 capas: la capa externa llamada epidermis, otra más interna denominada dermis y debajo de esta última la hipodermis.
La capa más externa, epidermis, está en continua descamación porque sus células (queratinocitos) se dividen y reemplazan continuamente. Por debajo de estos hay otra clase de células llamados melanocitos. Los melanocitos se encuentran en la parte más inferior de la epidermis. Producen melanina que es el pigmento que da color a la piel.
Quien me conoce me considera una fanática de la protección solar, y siempre digo que los que tenemos la piel clarita aprendemos de chiquititos a protegernos del sol, porqué nuestra piel se quema, y eso duele… pero claro en estas latitudes en las que vivimos lo habitual es una piel algo más oscura… de esas que “no, si yo no me quemo, voy a la playa un día y ya estoy moreno”
Pues bien, ¿qué me dices si te explico que la piel se DEFIENDE DEL SOL fabricando MELANINA?
Cuando recibimos los rayos solares, los melanocitos producen más pigmento, con lo cual la piel se broncea y se oscurece. Por lo tanto, ahí nuestra piel SÍ ESTÁ SIENDO AGREDIDA POR EL SOL y NECESITA UN PROTECTOR SOLAR.
¿QUÉ ES EL MELANOMA?
El melanoma es el cáncer de piel más peligroso.
Un melanoma es el tipo de cáncer en que las células tumorales y con capacidad de invadir los tejidos sanos e implantarse en ellos se forman a partir de los melanocitos.
Habitualmente, el primer signo de un melanoma es el cambio de tamaño, forma, color o textura de un lunar, o también puede aparecer como un lunar nuevo, que puede ser negro, anormal o de aspecto extraño.
La cirugía es el primer tratamiento para todos los diferentes estadios del melanoma. La quimioterapia y la radioterapia también forman parte del tratamiento, así como la terapia biológica y localizada. La terapia biológica aumenta la propia capacidad del cuerpo para combatir el cáncer. La terapia localizada usa sustancias que atacan células cancerígenas sin dañar células sanas.
ABCDE…
Se trata de la regla nemotécnica para el método de diagnóstico precoz del melanoma:
- A representa Asimetría: el contorno de una mitad no es igual al otro
- B representa Bordes: los bordes son desiguales, borrosos o irregulares
- C representa Color: el color es disparejo y puede incluir tonalidades negras, cafés y canela
- D representa Diámetro: hay cambios en el tamaño, generalmente se vuelven más grandes.
- E representa Evolución: cualquier cambio en el lunar en las últimas semanas o meses
PREVENCIÓN
Nunca me cansaré de repetir que MÁS VALE PREVENIR QUE CURAR y que CON EL SOL NO SE JUEGA. Por lo tanto el mejor ataque es una buena defensa y las mejores armas de defensa que tenemos es EVITAR LA EXPOSICIÓN SOLAR con FOTOPROTECTORES o CREMAS DEL SOL
La exposición solar sin una protección adecuada aumenta el riesgo de tener cáncer de piel a medio y largo plazo. ¿Sabías que en los últimos 4 años ha aumentado un 38% el número de casos de melanoma? ¿y que cada año se diagnostican 150000 nuevos cáncer de piel de los cuales más de 4000 son melanomas (graves)?
Pues al toro y pongámonos al día con los farmaconsejos imprescindibles para una buena prevención:
1. CONOCER TU FOTOTIPO
El fototipo de cada persona permite escoger el protector solar más adecuada. El fototipo indica la sensibilidad personal al sol y la capacidad de broncearnos según el color de la piel, el pelo y los ojos.
Para conocer tu fototipo, puedes consultarnos en la farmacia.
Como no existen protectores solares universales, en la farmacia conocemos el más indicado para cada persona y situación. No dudes en consultarnos!
2. PROTECTOR SOLAR
Para que el protector solar haga el efecto que esperas debes aplicártelo adecuadamente:
Para obtener un resultado óptimo de la utilización de un fotoprotector, es necesario seguir 4 normas básicas:
- Aplicar el fotoprotector en casa, antes de salir a la calle A DIARIO.
- Hacerlo sobre la piel bien seca.
- Aplicarlo 30 minutos antes de exponerse al sol.
- Usa la cantidad adecuada, sin escatimar producto. La salud no tiene precio!
- La ropa es una excelente medida fotoprotectora.
- El uso de sombreros o gorras deberían implantarse en todos los ámbitos.
- En España se recomienda una protección sola de factor 30 durante todo el año y de factor 50 en verano.
- La finalidad del fotoprotector no debe ser nunca la prolongación del tiempo de exposición.
- Hay que evitar la exposición en las horas centrales del día, esto es de 14 a 16 de la tarde.
- El daño producido por la exposición al sol es acumulativo. ¿Sabías que el 80% parte del daño de las radiaciones solares se produce antes de los 18 años?
- Las cremas solares no deben utilizarse en menores de 1 año.
3. HIDRATACIÓN PARA RESTAURAR LA PIEL
Después de la exposición solar debes restaurar el agua que has perdido, y lo puedes hacer bebiendo agua. aunque no tengas sensación de sed, y ofreciéndola a menudo a pequeños y mayores.
Para exposiciones prolongadas al sol (playa, piscina, río…) aplícate una loción para después del sol que está especialmente formulada para la recuperación de la piel y la restauración del manto hidrolipídico que permite retener el agua de nuestra piel.
Además una dieta rica en verdura y fruta te permite mantener buenos niveles de agua en el cuerpo.